viernes, 27 de noviembre de 2015

El agua del este de Kentucky arruinada por la minería y el fracking


George R. Gibson




Publicado en The Herald Leader
Por George R. Gibson
22 de noviembre de 2015 



Su editorial respecto al problema de medio ambiente en Kentucky aborda  los arroyos degradados más que el problema, aún más grave, de los pozos de agua destruidos. Esto es lamentable, ya que el 80 por ciento o más de los pozos en el área del condado de Knott han sido destruidos por la minería del carbón o por el gas de fracking.

Este porcentaje proviene de los empleados de la División de Tierras que estaban inspeccionando los pozos y las minas abandonadas. He confirmado informalmente esto a través de conversaciones con muchas personas en la zona.

Sin embargo, esta información,  no se dispone en el gabinete estatal de Energía y Medio Ambiente, porque cualquier hecho que se refleje negativamente en las empresas de energía es ocultado.

Así, el gas de fracking y la minería del carbón causan dos problemas en el este de Kentucky: primero, la presencia del gas está tan cerca de la superficie que las voladuras para fracturar las rocas permiten que el metano se filtre en los pozos. Y las rocas fracturadas a veces pueden conseguir que el agua desaparezca de los pozos.

El fracking ha estado destruyendo pozos en el condado de Knott desde 1950. El pozo de un vecino cercano fue destruido a principios de 1970. Estaba de pie en el porche de la casa cuando un pozo de gas cercano se frackeó. Sintió la explosión y luego vió una nube de humo levantándose de su pozo. Su agua a partir de entonces olía a huevos podridos y no podía ser utilizada para cocinar o beber.

Tengo otro vecino, donde tenían un agua tan pura que la gente la usaba para hacer el café. Yo estaba de visita hace unos 15 años cuando escuché golpes y vi las cortinas de la casa temblar. Una empresa de carbón estaba eliminando una montaña cerca de su casa. Su agua se malogró posteriormente y, al igual que muchos en la zona, ahora compra agua embotellada para cocinar y beber.

Un amigo en el condado de Letcher probó su agua antes de que los pozos de gas fueran perforados en su propiedad. Su agua se arruinó y la compañía de gas que tenía ocho pozos perforados pero no pudo encontrar agua de buena calidad. El último pozo fue perforado en una antigua mina, anteriormente propiedad de un minero que hizo el dinero suficiente para comprar su respetabilidad en Lexington. Se encontró un montón de agua; sin embargo, estaba contaminada por el ácido y el aceite usado que habían sido almacenados en la mina.

Muchas personas no demandan a las empresas de energía, ya que carecen de los recursos para contratar a un abogado. Además, saben que las compañías niegan rutinariamente su culpabilidad y tienen un grupo de abogados para defender sus actuaciones. Los que han demandado no han encontrado ningún amigo en el Consejo de Dirección de Energía y Medio Ambiente, que debería llamarse más apropiadamente el Consejo de Dirección para la Protección de Empresas de Energía.

El agua se suministra desde el Lago Fort Carr a algunos residentes de los condados de Knott, Letcher y Perry bajo los auspicios de la División de Tierras para las minas abandonadas, presumiblemente para los pozos destruidos por la minería antes de 1982. El lago está rodeado de montañas que han sido decapitadas, por lo que se drenan minerales y sedimentos. El futuro de este suministro de agua es, por tanto, incierto.

Muchos residentes no pueden permitirse el gasto de pagar tuberías para conectar con el agua de la ciudad y muchos están usando el agua de las minas abandonadas. Los que se conectan pagan una cuota mensual por el agua que antes era gratis. Ellos están pagando un impuesto permanente por la energía que se transmite a sus descendientes.

Mientras tanto, las empresas de energía y los políticos han asegurado que cumplen con la enorme cantidad de gas que fluye desde las montañas y que está mínimamente gravado.

Algunas personas han instalado caros sistemas para depurar su agua; Sin embargo, un número sorprendente de personas utilizan el agua sin analizar de las minas de carbón abandonadas. Una mina en la montaña de Wolfpen en el condado de Knott tiene un tubo de plástico por el que el agua corre constantemente. Esta mina abastece de agua a la mayor parte de las casas cercanas y los residentes de otras zonas pueden verse a menudo llenar garrafas de plástico.

Un individuo preocupado por la salud de su nieta mando analizar el agua hace unos años: la prueba reveló la contaminación por E. coli. Este informe fue entregado a las autoridades de salud en el condado que pusieron un aviso en el sitio. La gente, sin embargo, continúa usando el agua y el cartel finalmente ha desaparecido.

¿Por qué se ha permitido que esto pasara? ¿Y por qué no ha habido un clamor nacional acerca de este problema? Los políticos han permitido que esto suceda, ya que están más interesados ​​en servir a los intereses monetarios que a la gente, y el estereotipo habitual de los Apalaches ha proporcionado la cobertura a los políticos y a las empresas de energía desde hace más de 100 años.



George R. Gibson, un músico, vive en Mallie



El carbón fue descubierto en Kentucky en 1750 y la explotación comercial se inició en 1900. En 2010 existían 442 minas de carbón en el estado. Además de los aspectos contaminantes y ambientales de la industria, una de las prácticas más polémicas es la voladura con explosivos de las cimas de las montañas, eliminando unos 120 metros de altura para dejar expuestas las vetas de carbón subyacentes. La industria defiende este procedimiento por ser más seguro que el establecimiento de minas subterráneas. La minería del carbón es apoyada en Kentucky por demócratas y republicanos, si bien éstos últimos defienden la práctica de la eliminación de la cima de la montaña. 

En la fotografía una “chapa del carbón” de 50 centavos, antigua moneda de uso interno y sin curso legal con la que se pagaba a los mineros. Los poblados mineros eras escasos en servicios y se levantaban en zonas desoladas. Las pocas tiendas y almacenes eran propiedad de la propia empresa minera que aceptaba las chapas como pago y aumentaba la dependencia de los mineros con la compañía.



Para acceder al artículo, 








No hay comentarios:

Publicar un comentario