La Asamblea contra la Fractura Hidráulica de Cantabria entregó ayer más de 6.000 firmas y alegaciones en la Delegación del Gobierno contra el proyecto de Repsol 'Luena Profundo' que prevé la perforación de un pozo mediante el uso de esta técnica en los Valles Pasiegos. Este es el primer paso de la ofensiva que prepara el colectivo para derogar los permisos del fracking en Cantabria. Si el ministro de Industria y Energía, José Manuel Soria, «no nos escucha», se lo dirán «a las bravas», clamaron ayer el centenar de personas que se concentró frente a la sede de la Delegación.
Ignacio Molinos, portavoz de la plataforma, subrayó que no se debe consentir que se realice «ningún trabajo» relacionado con la fractura hidráulica, como el estudio de sísmica anunciado por Repsol, porque «una vez que se construyen los cimientos de una casa luego no la van a prohibir construir». Molinos reconoció que será «muy difícil» parar con una ley la realización de ese estudio porque no tiene un impacto grave sobre el territorio, pero «lo que no se puede hacer en los tribunales, será la gente de Cantabria la que lo defienda».
Ayer mismo la plataforma contra el fracking colgó en su página web el mapa de carreteras y caminos que seguirán los camiones de Repsol para realizar los estudios sísmicos. Se trata del «plano del subsuelo que posteriormente les posibilitará saber dónde perforar. Si no consiguen ese plano, no encontrarán su tesoro, que sería nuestra ruina», advierte. El colectivo informa a los afectados que Repsol «ya ha pasado el examen general» para realizar el estudio sísmico, contra el que nada han podido hacer «ayuntamientos, consejerías o el gobierno autonómico porque sería prevaricar». Por eso, «tendrá que ser la gente quien se lo impida. La población no prevarica», y para ello hace un llamamiento para concentrarse «junto a los camiones una vez lleguen». La página invita a los que conozcan cada zona a anotar el nombre de cada tramo para tener una información más detallada.
La plataforma está elaborando también pegatinas contra el fracking para que los empresarios locales las coloquen en sus productos. Además, según explicó Molinos a este periódico, para el verano, aún sin fecha, se organizará una «gran marcha» a Santander de vehículos procedentes de los valles de Cantabria, como paso previo al bloqueo de camiones.
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