Sputnik
12 de junio de 2017
Si
bien la explotación de crudo a través de la fracturación hidráulica no es nueva
en Colombia, la técnica de romper la roca con una emulsión de agua y productos
químicos, que se desarrolló principalmente en EE. UU., jamás ha sido
implementada en el país sudamericano. Según advierten algunos expertos, las
posibles consecuencias medioambientales y en el subsuelo serían catastróficas.
'Cartas sobre la mesa' viaja a Colombia para moderar un debate sobre la
aplicación del ‘fraking’ en este país.
El fracturamiento hidráulico o
'fracking' es la técnica mediante la cual se busca extraer gas y petróleo de
zonas de donde la tierra no está fragmentada. Mientras muchos países a nivel
mundial han rechazado el uso de este método, en Colombia se están otorgando
licencias para desarrollar esta actividad, generando numerosas protestas en las
poblaciones afectadas. El periodista Luis Castro discute con expertos locales
sobre la cuestión.
John Cerón, presidente de la
Asociación Colombiana de Geólogos y Geofísicos del Petróleo (ACGGP), destaca
que "el desarrollo sostenible es posible con una industria responsable que
conoce sus riesgos y los puede manejar". "El medio ambiente lo
tenemos que cuidar, pero un país como el
nuestro puede utilizar sus recursos", considera.
"La pregunta es, ¿por qué
hay 30 o 40 países en el mundo que lo han prohibido?", plantea Luis Álvaro
Pardo, director del Centro de Estudios Mineros de Colombia (CEMC).
"Algunos, porque no tienen la evidencia científica todavía y utilizando el
principio de protección dicen 'no, todavía no', pero otros sí ya tienen la
evidencia de las consecuencias ambientales que la actividad genera",
explica.
En esta línea, afirma que en
Colombia "en lugar de aprender de
otras experiencias, nos lanzamos lanza en ristre para realizar una
operación que ya sabemos que genera unos daños" bajo el argumento de
"si no hacemos 'fraking', no tenemos plata y entonces hay que hacer
reformas tributarias". "No podemos aceptarlo, porque ese es un
argumento extorsivo", señala.
Por su parte, Julio Fierro,
geólogo con maestría en geotecnia, apunta que existen datos de contaminación de
agua y aire a causa de esta práctica. Según él, hechos como "encontrar
unos contenidos de arsénico pasados muchas veces de la norma colombiana en un
aljibe de una escuela nos tiene que
llamar a la reflexión y a la autocrítica. Seguir diciendo que no hay
problemas no es una buena idea", indica.
Para acceder a la noticia y ver VIDEO,
No hay comentarios:
Publicar un comentario